Derecho contractual | Después de que Lufthansa registrara otras pérdidas de mil millones de euros el año pasado, la aerolínea espera tiempos mejores este año, aunque las consecuencias de la guerra en Ucrania aún no sean previsibles.
Como todas las empresas del sector de la aviación, Lufthansa se ha visto muy afectada por la crisis del coronavirus. Aunque la dirección aún no desea emitir una previsión de beneficios, el director general Carsten Spohr parte de la base de que el tráfico aéreo experimentará un fuerte repunte este año. Tras un primer trimestre flojo, las reservas para las vacaciones de Semana Santa y verano casi alcanzaron el nivel anterior a la crisis de 2019. El Grupo Lufthansa, que también incluye las aerolíneas Eurowings, Swiss, Austrian y Brussels Airlines, pretende ofrecer este año el 70% de su capacidad anterior a la crisis en vuelos de pasajeros, frente a sólo el 40% el año pasado. Mientras que en el primer año del coronavirus se registraron unas pérdidas de 5.500 millones de euros, en 2021 esta cifra fue de 2.300 millones de euros. Mientras que las aerolíneas de red registraron elevadas pérdidas de explotación, la división de carga con Lufthansa Cargo logró un beneficio récord de 1.500 millones de euros. Lufthansa Technik y Catering también obtuvieron beneficios.
La aerolínea sólo se salvó de la quiebra gracias a importantes ayudas estatales y tuvo que prescindir de un total de 30.000 empleados sin despidos obligatorios en Alemania. Esto significa que el Grupo seguía teniendo 105.000 empleados en todo el mundo a finales de 2021. En conjunto, los costes de personal se han reducido estructuralmente en un diez por ciento y se espera que en 2020 estén entre un 15 y un 20 por ciento por debajo de los niveles anteriores a la crisis. Según el director general, el Grupo Lufthansa es ahora más eficaz y sostenible que antes de la crisis del coronavirus y quiere seguir siendo en el futuro una de las cinco mayores compañías aéreas del mundo.
Fuente de la información: Wirtschaftswoche.de desde 03/03/2022
